Una de las palabras más bellas del diccionario es la serendipia ✨
¿Sabes lo que es?
Según Wikipedia, “una serendipia es un descubrimiento o un hallazgo afortunado e inesperado que se produce cuando se está buscando otra cosa distinta. También puede referirse a la habilidad de un sujeto para reconocer que ha hecho un descubrimiento importante aunque no tenga relación con lo que busca. En términos más generales, se puede denominar así también a la casualidad, coincidencia o accidente”.
Me gusta más como lo dice la RAE, “hallazgo valioso que se produce de manera accidental o casual”. Suele pasar mucho en la Ciencia. Por ejemplo, el descubrimiento de la penicilina fue una serendipia.
La CocaCola iba a ser un jarabe para combatir problemas digestivos, y entre un farmacéutico y un contable decidieron hacer de ella una marca.
¿Lo has vivido alguna vez?
Detente un momento y piénsalo.
Una de esas experiencias que vives completamente por casualidad, que no estabas buscando, pero que resultan de gran relevancia en tu vida. Quizá incluso tienen la capacidad de cambiarla por completo.
Como esas personas que al salir de fiesta una noche sin ganas, y conocen a quien va a ser el amor de su vida.
O quienes al cambiar de calle se han cruzado con un amigo al que llevaban años sin ver, retoman la relación y montan juntos una empresa.
A mí, por ejemplo, me ha pasado con la pandemia. Yo vivía en Madrid antes del Covid y es donde pensaba vivir muchos años. Elegí volver a Alicante para estar con mi madre temporalmente. Yo no era consciente de que esa elección me llevaría a rehacer mi vida, crear una pareja y decidir establecerme aquí de nuevo, en el barrio donde siempre soñé vivir, y donde siempre me imaginé saliendo a correr por las mañanas (de niña no era nada deportista, así que aún no entiendo por qué imaginaba tal cosa, pero mucho menos comprendo que efectivamente todo se esté cumpliendo 😅).
También me pasó hace unos 6 años cuando hice un cursito en la Universidad de Alicante sobre una materia desconocida que se iba a poner de moda, conocida como “Experiencia del Cliente”, pensando que me vendría bien para el Currículum. La materia resultó gustarme tanto, que es a lo que hoy en día me dedico, que me apasiona y disfruto como nunca imaginé.
“Poca broma” esto de la serendipia, ¿eh?
Lo mejor es que puede llegar cuando menos te la esperas. De ahí que sea tan importante tener la mente y la visión abiertas, hacer actividades nuevas, salir de la zona de confort, de lo que siempre haces, tomar acción. Porque cuando haces cosas diferentes, pasan cosas distintas.
Lo mismo les pasó a la pareja protagonista de la historia que traigo hoy, Sebastião Salgado y Lélia Wanick Salgado.
Una pareja de brasileños que se casaron bastante jóvenes y se fueron a trabajar a París. Él era un prometedor economista y ella, una estudiante de arquitectura. Cuando Léila compra una cámara fotográfica para hacer un trabajo sobre edificios, y Sebastião la toma entre sus manos, se siente completamente atrapado por ella.
La fotografía de inmediato empezó a invadir sus vidas. Dejaron cada uno los caminos seguros que habían elegido y se volcaron en esta pasión. Él tomaba las fotos y ella creaba una historia que vendía en libros, exposiciones e incluso, documentales. Ambos han recibido muchos premios a nivel internacional, siendo él uno de los fotógrafos más importantes de este siglo.
Entre los dos, crearon un tándem perfecto 👫
Incluso han conseguido reforestar un bosque en Brasil 🌳. Algo que muchos habrían etiquetado como imposible.
Un ejemplo de que cuando dos personas se quieren y creen en sí mismos, pueden lograr lo que quieran ❤️
👉🏻 Aquí puedes leerla completa. 🌳❤️
¿Quieres saber más?
Hace unos años leí el primer libro que hablaba de este concepto, y me gustó mucho. Se llama Sincrodestino, de Deepack Chopra. Él habla de que estas coincidencias no son casualidad, sino que pasan por algo. Están unidas a tu destino. Y me pareció un concepto precioso.
Me gusta vivir pensando que la vida tiene una finalidad, un motivo. Y este libro habla de eso.
O también puedes ver la idea en la película del 2001, Serendipity 😉
La semana pasada estuve en Barcelona, junto a mi compi Sandra -de la que aprendo tantísimo-, impartiendo una formación de 3 días sobre Metodología de Experiencia de Cliente* en un laboratorio farmacéutico.
*Aquello que antes te contaba, sobre un “cursito” que hice por probar hace unos años, y que hoy se ha convertido en una forma de vida 🤓
¿Sabes con qué 3 aprendizajes me quedo de esos 3 días?
Si quieres aprender algo de verdad, enséñalo. Cuando más aprendes de algo es cuando lo explicas.
En tus conversaciones o charlas, escucha y aprende de las preguntas que te hacen. Facilita que te pregunten. Te sorprenderás de las reflexiones de los demás y de tus propias respuestas. Qué valiosas son esas preguntas…
Cuanto más sencillo y fácil expliques un concepto, más lo disfrutas tú y quienes te escuchan. No hace falta intentar quedar profesional. Lo importante es resultar cercano.
Y hasta aquí por hoy 😋
¡Gracias por leerme!